domingo, 29 de marzo de 2015

Las andanzas y desventuras de Belén Esteban

LAS ANDANZAS Y DESVENTURAS DE BELÉN ESTEBAN





Suplico a Vuestra Merced reciba este pobre trabajo de la que abajo firma. Y como Vuestra Merced me ruega que le escriba y relate mi caso muy por extenso, me pareció conveniente empezarlo desde el principio, para que se tenga noticia completa de mi persona, pero también para que los que son nobles y ricos por herencia,  dejen de lanzar rumores sobre que vivo del cuento  y que a saber de dónde saco el dinero que tengo y  para que no piense que lo hago robando le voy a  contar algunos aspectos de mi vida que le sirvan de aclaración.
Pues sepa Vuestra Merced, antes de nada , que a mí me llaman la princesa del pueblo. Mi nombre es  María  Belén Esteban Menéndez  y soy hija de Francisco Esteban de Diego y de María del Carmen Menéndez Sánchez. Nací en Madrid en 1973 y tuve dos hermanos, Juan Pedro y Francisco Javier. En mi casa nunca faltó el pan pero vivíamos con mucha modestia y no podíamos permitirnos grandes lujos.
Mi padre murió joven  con 67 años, víctima de un cáncer.  Cuando mi padre cayó enfermo, mi vida cambió completamente porque vivía prácticamente para él y la doctora nos preguntó si queríamos sedarle y dije que sí para que dejara de sufrir y pudiera morir tranquilo, pero lo que de verdad cambió mi vida fue conocer  y hacerme novia de  Jesulín de Ubrique. Antes no me conocía nadie pero a partir de aquel momento  comenzó mi salto a la fama. Tuvimos una hija, Andrea que es lo que más quiero de este mundo, pero la cosa no salió bien y nos separamos aunque no me arrepiento de haber conocido al torero porque desde entonces no he parado de hacer programas de televisión y ganar dinero con ellos. Me casé con Fran Álvarez pero él se aprovechó de mi éxito y la historia tampoco salió bien. Hubo un tiempo que se me subió la fama a la cabeza y tuve problemas con las drogas pero me di cuenta de que no podía seguir así y aunque fue muy duro ya me he curado. Gano mucho dinero hablando de  mi vida privada, de mi hija, de mis novios, de mis operaciones…, pero es mi vida y con ello no hago mal a nadie. Todos los programas del corazón me llaman para pedirme entrevistas  , todos quieren llevarme como tertuliana , pero si la audiencia quiere verme y escucharme será por algo. No robo a nadie, vendo mi vida privada y aunque muchas veces canse tener a los medios siempre detrás  y que no pueda hacer nada sin que todo el mundo se entere,  a mí es un precio que me compensa pagar.
Algunos pensarán que esta vida no es vida, siempre con los periodistas encima, pero yo  no puedo imaginar otra mejor, porque de no tener casi nada he pasado a tenerlo todo y a vivir como una princesa: la princesa del pueblo

Belén Esteban